
De la bondad del método da fé que existen casas de 300 a 400 años de antigúedad que están cubiertas con césped. Pese a ello, la idea que tenemos actualmente de lo que es el confort, dificulta instalar este techo, pues hoy no toleramos manchas de humedad en nuestro techo, que además pudieran ser agresivas para nuestra salud. Una serie nueva de técnicas han evitado, (y encarecido), que la humedad, imprescindible para mantener el tapíz vegetal, traspase el tejado permitiendo su instalación en cualquier techo sea de vivienda o de un edificio industrial.
Sobre este forjado se coloca una capa que impide el paso del agua, normalmente una chapa de aluminio o un plástico de larga duración que además actúan de mini depósito de agua de lluvia a la par que desvían el agua sobrante hacia los canalones de evacuación como una cubierta tradicional. Sobre ella se coloca un producto que actúe como una esponja, repartien

El grosor de la capa de tierra varía en función del uso que se les pretenda dar al “Techo Verde“. El más básico solo pretende devolver a la naturaleza una parte del espacio que le hemos arrebatado para construir el edificio. En este caso la capa de tierra bastará con que tenga 12 cm de espesor, suficiente para permitir susbsistir con solo el agua de lluvia y el rocío mañanero a vejetación y arbustos autóctonos, que a su vez crean el hábitat para que proliferen insectos e invertebrados como mariposas, hormigas y lombrices. Las aves encontrarán aquí alimento y lugares adecuados para anidar. Por otra parte en la parte alta de la casa, la capa humeda suaviza el frío en unvierno y refrigera en verano.
En el otro extremo está el cultivo de huertos o jardines, necesita tener un estrato más profundo de tierra, hasta unos 30 cm, e incluso un sistema de riego complementario a la lluvia, que puede aprovechar las aguas grises del propio edificio. En el conocido libro “El Horticultor Autosuficiente” de John Seymour se afirma que bastan 9 m2 cuidados de forma ecológica, pero intensiva, para producir la verdura que necesita una familia, qué no se podrá cultivar en un huerto de como mínimo de 20 m2, que es lo que quedará en un chalet adosado, cuando descontemos de la planta del edificio el es espacio de las terrazas del último piso. Puesto que el huerto será visitado con frecuencia, hay que añadir el coste del acceso por una escalera y el vallado perimetral, para evitar caídas, gastos que se ahorran en una cubierta vegetal que no se pretenda cultivar. Entre los dos extremos hay una gama intermedia que combina la vegetación más o menos salvaje y la cultivada con riegos, podas, etc.